S.O.S

Hola a todos de nuevo, casi siete meses después. Regreso a la web después de leer que muy probablemente Quique González ha decidido romper con su discográfica y que, por lo tanto, ha «perdido» el apoyo que la industria le estaba dando hasta ahora. Lo cierto es que su web oficial lleva meses sin actualizarse y creo que ahora es más necesaria que nunca una página alternativa en la que los seguidores de Quique podamos ir teniendo información e ir arropando su trabajo. Me propongo por tanto retomar este proyecto que dejé abandonado por motivos de trabajo allá por el mes de diciembre. Para retomarlo son necesarias dos cosas, ganas y ayuda. Lo primero no me falta, pero vista la experiencia de la primera vez va a ser imposible llevar esto en solitario. Por eso, me gustaría contar con la ayuda de un grupo de personas, seguidoras de Quique, que estén dispuestas a colaborar tanto en la búsqueda de noticias, como en el diseño, documentación… El objetivo es intentar hacer una gran web sobre el cantautor madrileño. Todas las personas que estén dispuestas a echar una mano pueden ponerse en contacto conmigo en averiayredencion@gmail.com Si al final conseguimos reunir a la gente necesaria para sacar esto adelante tendréis noticias en las próximas semanas. Ojalá sea posible hacerlo porque me parece más necesario que nunca. Cuento con vosotros.

Tocando el cielo

Grande Quique, y gracias. Gracias por tus canciones y por seguir viniendo a Pamplona a pesar de que, como esta noche, apenas 300 te estábamos escuchando. La ampliación de la sala al doble de capacidad ha hecho que el especto fuese algo desangelado. Pero bueno, allí estábamos los 300-400 incondicionales que tiene Quique por estas tierras.

La verdad es que un concierto que se puede permitir el lujo, por la riqueza de su repertorio, de empezar con Vidas Cruzadas no necesita muchas más explicaciones. Uno tras otro han ido sonando los temas más conocidos del madrileño con alguna dolorosa excepción como Aunque tú no lo sepas o De haberlo sabido. Pero bueno, las dos horas dan para lo que dan. Dentro de 10 años será todavía más difícil meter en un concierto tantas hermosas canciones.

Pero bueno, empecemos por partes. El concierto estaba previsto para las diez de la noche, y ha empezado unos 15 minutos más tarde. Como digo el arranque ha sido fulminante con Vidas cruzadas, y a partir de ahí han ido sonando todos los clásicos de Quique. Parece que todavía lo estoy viendo, descamisado pero con americana, pelo largo y barba de haberse perdido en alguna isla remota. Parece mentira que alguien que canta con los ojos cerrados pueda ser capaz sin embargo de ver más allá que la mayoría y escribirlo además sobre un papel. Un genio. Si fuese anglosajón me hubiese tenido que abrir paso a codazos en la sala. No fue el caso, y a pesar de los pesares, también eso tiene su encanto.

Luego ha llegado el tema de los bises, que a mí particularmente es algo que me saca de quicio. Si están previstos en el set-list, como en los conciertos de todo el mundo, dejan de ser bises y de tener gracia. Los bises son regalos del artista porque en una sala o en una ciudad en concreto se siente bien, con ganas, y le apatece hacer de ese concierto algo diferente. Lo de dar dos bises ya preparados no me gusta. Quizá por eso cuando se retiró la primera vez no hubo grandes aplausos. Faltaban muchas grandes canciones por tocar y la gente sabía que iba a volver al escenario. ¿Para qué aplaudir si sabes que Quique no se va a ir después de haber tocado sólo hora y media? Pero en fin, es algo que hace todo el mundo.

Después de la apoteosis final con la ciudad del viento, cuando éramos reyes y salitre, entre otras, ha acabado el concierto después de dos horas más o menos exactas de reloj. Hablando de relojes, os dejo un regalito en forma de vídeo. Es de la canción Reloj de plata. La calidad no es muy buena, pero tiene el valor de ser de esta misma noche, como quien dice.

Una vez acabado el concierto nos hemos quedado casi en familia en la sala apurando el último cubata. En eso estábamos cuando hemos visto que la gente podía ir al camerino de Quique por grupitos pequeños. Yo tengo que reconocer que no soy muy partidario de esas cosas. Me da vergüenza y siento que agobio al artista. Aun así, y como un colega mío iba a ir, pues me he apuntado y he tenido la suerte de poder entrar al camerino. No quería darles la chapa ni nada, así que he estado unos instantes hablando con Javi Pedreira (infinita tu paciencia, macho) para darle las gracias por alegrarme la semana y la vida con su música. Él me ha dado als gracias por mis palabras, pero aunque se lo digas es imposible que ellos sean conscientes de lo que supone de verdad que su música te acompañe durante todo el año, cuando vas a currar en el coche, cuando quedas con los amigos, cuando estás solo en casa, cuando vas de mala ostia a algún sitio, cuando estás triste, cuando te sientes el amo del mundo… En fin. Luego le he dado la mano a Jacob y he visto a Quique hablando con dos chavalas. Es una situación un poco extraña porque sientes que estás invadiendo su mundo. Así que me he limitado a darle la mano y decirle un gracias que probablemente haya sido incapaz de reflejar la gratitud que uno siente cuando alguien es capaz, con notas y palabras, de abrir rincones de tu alma que ni tú mismo conocías o serías incapaz de expresar con esa precisión y brillantez. Apretón de manos y a casa. Gracias Quique.

Avería sin redención (en mi caso)

Los Reyes se han adelantado. Quique González ha enviado una carta manuscrita (la que veis arriba) a todos los seguidores que votaron para elegir el repertorio de su gira de celebración del décimo aniversario. La misiva iba acompañada de una grabación de Tu sabes lo que tienes que hacer, una canción que se quedó finalmente fuera de su último disco. Un lujo. Y digo «que votaron» y no «que votamos», porque yo no voté y me he quedado sin ella. Los que seguís el blog de vez en cuando ya conoceis que hice mi propio set-list para publicar en esta página. Ahí comprendí que elegir las canciones era muy difícil, una misión casi imposible, porque hay tantas y tantas canciones que me gustaría escuchar en un concierto… Cada canción de Quique te dice algo nuevo dependiendo del día en que la escuches y del estado de ánimo que tengas. Las canciones que elegiría en este momento no tienen nada que ver con las que elegiría mañana por la mañana. Y, la verdad, me apetecía ir al concierto sin influir en él, sin pensar si ha tocado las que yo sugerí o si ha tocado otras distintas. Quiero ir a disfrutar de lo que vosotros hayais decidido y punto. Así que a lo tonto me he quedado sin canción y sin carta. Lo último lo he podido rescatar por internet y os la pongo aquí para que todos podais leerla. La canción, espero que algún alma caritativa se apiade de mí y me la envíe a averiayredencion@gmail.com Y si no, ya tendré ocasión de escucharla alguna vez. En cualquier caso, hay que reconocer que es todo un detallazo de Quique que habla de la talla de un artista y de su vinculación con sus seguidores. Gracias Quique.

Entrevista con Quique en 20 minutos

Os reproduzco aquí la entrevista que le han hecho a Quique González en el periódico 20 minutos. Si no la habéis leído merece la pena.

Quique González: «Me gustaría abrir más los ojos al cantar, pero uno no planifica eso»

MIRENTXU MARIÑO. 10.11.2008 – 07:34h

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Quique González en una calle de Madrid. FOTO: JORGE PARÍS.

Habla con tono pausado y una ronquera producto del clima otoñal. El frío de su ciudad, Madrid, le desconcierta, por eso vive en la costa. Quique González, querido y respetado por todos, cumple diez años en la música y ha salido de gira para celebrarlo.

¿Cómo se presenta esta gira?
Con ganas. Acabaremos con 71 conciertos. Hemos hecho una pequeña familia los diez.

¿Está ya pensando en lo siguiente que hará?
Tengo canciones y un proyecto que, si sale, será bonito.

Sus fans le han hecho el repertorio de los conciertos.
He recibido 1.500 mails, me parece una pasada. Significa que las canciones son importantes para la gente. Cumplir diez años es un buen motivo para hacerles un guiño.

¿Esa década trabajando le hace sentirse mayor?
Estoy empezando a notar señales (risas). Oigo voces. Parece que no te das cuenta de que pasa el tiempo, porque siempre haces lo mismo. No soy tan joven, tengo 35 años…

¿Algún momento especial que guardar en la memoria?
Tengo cariño por conversaciones que he tenido con gente a la que admiraba antes de dedicarme a la música. Como Johnny Cifuentes, de Burning o Miguel Ríos. Llevan más de 30 años en esto y mantienen el espíritu del rock and roll. Y también por el cariño del público. Que te aplaudan cada tres minutos es fantástico.

Le sentará a uno bien…
Pero no se puede vivir de eso, no es real, no puedes construir tu vida en torno a ello.

¿Continúa su tormentosa relación con las discográficas?
No conozco a nadie que esté contentísimo con su discográfica. Sigo siendo crítico con ellos, pero no es una pelea. Por eso, ellos están en un despacho y yo toco canciones.

Todo el mundo, al parecer, le tiene muy bien considerado.
No creo que le guste a todos. Quizá no termino de ser pop o rock o indie. En los momentos bajos, el apoyo y el respeto que me ha demostrado gente a la que admiraba, o que no conocía, me ha servido para aguantar el tirón.

¿Dé donde viene ese amor por la música americana?
Por las canciones. Me gustan más las canciones que cualquier género e independientemente de la situación geográfico. Lo que ahora se llama country alternativo es un formato bueno para contar historias. Pero también me gusta mucha música sudamericana y mucha de aquí.

En cualquier caso, hoy apenas hay buenas historias.
No, aunque hay gente haciendo muy buenas canciones, pero supongo que no están en los medios grandes.

¿Cierra los ojos cuando canta por manía o por sentimiento?
Hay mucho de concentración. Son muchas letras y es una manera de meterme en la canción. De hecho, me gustaría abrir los ojos más, pero uno no planifica eso.

¿Cuánta importancia le concede a los premios?
Tampoco me han dado muchos (risas). Es un tópico, pero el premio es que la gente venga a los conciertos. Tampoco creo que tengamos muchos prestigiosos. El criterio es que no hay criterio. Pero los hay, como el Ojo Crítico que le dieron a Vetusta Morla.

¿Le gusta el grupo?
Son buenísimos, majísimos y son unos valientes.

¿Qué sería de Quique sin La Aristocracia y viceversa?
Ellos son bastante grupo, han tocado con otros artistas. Me siento parte de ellos.

 

¿Cuál es su disco fetiche?
Astral Weeks de Van Morrison y Oh Mercy de Bob Dylan, que es muy especial para mí. Honestidad brutal de Calamaro. Son discos que cuando los ponen no te decepcionan.

¿Le falta por hacer alguna colaboración?
No se, pero Enrique Bunbury dice que mi última gira era de tributos y colaboraciones… Nunca he cantado con Sabina o Serrat.

Los músicos tienen siempre pinta de solitarios…
Supongo que la condición del viajero limita ese perfil solitario. Pero también tengo un montón de buenos amigos, más de 10 y de 15. No como la gente que dice ‘yo los cuento con los dedos de la mano’, pues vaya mierda (risas).

¿Cuál es el último concierto al que ha ido pagando?
Todos, incluso cuando voy a los de mis amigos. Me gusta pagar la entrada. El último fue The Posies en Astillero.

Sabina ya está grabando su próximo disco

Aquí estoy de vuelta. Ya me podéis perdonar porque ando bastante liado y con poco tiempo. Las aficiones que no dan de comer tienen estas cosas, en fin, pero el blog no está muerto, seguirá vivo. Hoy vuelvo para daros una noticia que nada tiene que ver con Quique González, pero que os puede interesar. Joaquín Sabina, otro de mis grandes músicos de cabecera, se encuentra ya grabando algunas de las canciones de su próximo álbum. La cosa va bien y el de Úbeda lleva ya algunas semanitas empezando a grabar cosas que luego habrá que retocar y todo eso. Pero bueno, el proceso parece ya imparable y habrá disco a finales de año o comienzo del próximo. Además, es seguro también que hacia la primavera de 2009 habrá gira de presentación y no será en formato acústico. Espero que los seguidores de Quique me perdonéis esta pequeña licencia, prometo seguir actualizando el blog y muchas gracias a los que habéis dejado comentarios últimamente. Se agradece saber que hay alguien que te lee y que valora lo que haces. Gran canción Backliners, cierto es.

Quique, en el backstage

Estos días está la cosa bastante parada, así que tiraremos de Youtube para animar un poco al personal. Muchos ya habréis visto este vídeo, que viene incluido en el disco Pájaros Mojados y es sobre la gira de Salitre, que seguramente a muchos les traerá grandes recuerdos. Que lo disfrutéis.

Parte 1

Parte 2

Mi set-list de Avería y redención #7 (2007)

 

Hoy llegamos al último disco de Quique, Avería y redención #7. Tengo que decir que tenía muchas ganas de que llegase porque, aunque probablemente mucha gente no comparta esta afirmación, es el mejor disco de Quique González junto a Salitre. En Avería y redención Quique se desangra literalmente. Son letras sinceras, crudas, desnudas. Pero no es una tristeza o una nostalgia sin salida, sino todo lo contrario. Es una avería con redención, una herida que te hace fuerte, un golpe del que te levantas. Tengo que reconocer que es un disco duro. A mí en la primera audición me gustó pero tampoco me entusiasmó, pero conforme lo he ido haciendo mío he ido descubriendo cosas. Esta es una característica que para mí sólo tienen los grandes de la música, y es que cada vez que escuchas una canción descubres algo que se te había pasado por alto en las anteriores escuchas. Elegir cuatro canciones de este disco, que me atrevería a decir que está entre los cinco mejores que se publicaron en España el año pasado, es un auténtico crimen. Pero hay que hacerlo.

En primer lugar elegiría una de las obras maestras del disco y probablemente de la carrera de Quique, La cajita de música.

Otra de las canciones que em entusiasman de este disco es Los desperfectos.

La tercera canción que elegiría para este set-list es la de Backliners.

Y la cuarta y última canción de este disco que seleccionaría es Trucos fáciles para días duros.

Con este post termino la serie de set-list de Quique.  Ahora es cuestión vuestra elegir las tres mejores canciones de cada disco para ayudar a Quique a hacer el set-list de la gira de conciertos que recorrerá España entre noviembre y diciembre para celebrar sus diez años de carrera. En la web oficial teneis información sobre cómo votar.

Mi set-list de Ajuste de cuentas (2006)

 

Hoy lo tengo fácil. En Ajuste de cuentas sólo hay cuatro temas inéditos, de los que elegiré dos. No me parece honesto elegir canciones que están en otros discos y que no he elegido antes. Eso sería jugar con ventaja. De todas formas, Ajuste de cuentas pasa por ser un disco valiente. Si todavía no has escuchado nada de Quique o sólo alguna canción que te ha hecho interesarte por él no lo dudes, cómprate este disco. En él se recogen las mejores canciones de sus discos anteriores, aunque hay que decir que Quique no se limita a interpretar sus canciones sino que les da una vuelta, las actualiza. En la mayoría de los casos las canciones ganan, en una minoría, no. Pero a pesar de eso me parece un disco valiente porque el Quique de 2006 no suena igual que el Quique de 1998, y por eso hace un esfuerzo por adaptar sus canciones al sonido que ha ido encontrando a lo largo de su carrera. Eso sí, si te compras el disco seguramente ya no podrás encontrar en el mercado la edición con DVD. Si la encuentras no lo dudes, cómpratela porque incomprensiblemente se quedaron fuera del disco algunos de los mejores temas de aquel concierto en directo. Esa es otra de las características del disco, la frescura que le da el que estén tocadas en directo.

Como siempre, me enrollo, así que vamos al grano. En Ajuste de cuentas hay cuatro canciones inéditas. Se trata de Caminando en círculos, Arañazos de piel roja, A cara de perro y Por la borda. La primera canción que selecciono de este disco es Caminando en círculos, escrita para la banda sonora de la película Arena en los bolsillos, a la que pertenece el vídeo que vais a ver. Preciosa canción.

Y luego, a pesar de que no hay mucho donde elegir, he tenido bastantes dudas entre A cara de perro y Por la borda. Me quedo con la primera, que creo que es la que mejor va a aguantar el paso del tiempo. «No me conoces bien, no soy un ángel, diviértete machacándome y luego pide un taxi». Genial.

Hoy la cosa ha sido relativamente fácil. Mañana termina la serie de set-list con el último disco de Quique, el de Avería y Redención #7, que tenía muchas ganas de que llegase, pero mañana os cuento por qué.

Mi set-list de La noche americana (2005)

 

La noche americana es quizá uno de los discos que mejor define a Quique González, ese cantautor que piensa y escribe en español y suena anglosajón. Lo primero hace que llegue mucho más a nosotros porque se expresa en nuestra lengua, con nuestras metáforas, nuestras imágenes inventadas, nuestro imaginario colectivo, nuestra historia, y lo segundo nos entusiasma a todos aquellos que desde siempre sentimos admiración por Dylan, Van Morrison o Cohen. Casi siempre los grupos o artistas que han querido sonar al estilo americano han escrito en inglés, alejándose así del público del que surge su música. Sonar americano escribiendo en español está al alcance de muy pocos, y Quique consigue que esa mezcla no chirríe. La noche americana es un tributo a esas raíces musicales, la demostración de que Quique se siente ya cómodo en ese sonido y se atreve a afrontarlo son rodeos, de forma directa. A partir de aquí, y en mi opinión, es cuando Quique despega en busca de su propio sonido, una búsqueda que se refleja en Avería y Redención, disco del que hablaremos dentro de un par de días. Bueno, vamos al grano que me enrollo y no paro.

La primera de las cuatro canciones que elegiría de este disco es Vidas cruzadas, un tema que en un concierto siempre te carga las pilas.

La segunda canción que seleccionaría es la de Alhajita.

Esta quizá no sea una de las más populares, pero es una de mis preferidas del disco y la tengo que escoger. Se llama Los motivos.

Esas tres canciones las tenía muy claras. El problema ha sido elegir la cuarta. En este disco hay muy buenas canciones como El Campeón, Me agarraste, Hotel Los Ángeles, Hotel Solitarios, 73 o Nunca escaparán. Y al final, después de romperme la cabeza no he elegido ninguna de las anteriores. Me quedo con Días que se escapan, una canción escrita con una sensibilidad que sobrecoge.

Espero que Quique no me haga ni puñetero caso, porque podemos acabar todos llorando. De paso os recuerdo que ya está abierta la votación para ayudar a Quique a elegir el set-list de sus conciertos de noviembre y diciembre. Si entrais en la web oficial encontraréis información, pero básicamente hay que enviar un correo a webquique@gmail.com con las tres canciones que preferís de cada uno de sus discos. Ojo porque yo estoy eligiendo cuatro para hacerlo un poco más fácil, pero en la elección por mail hay que elegir sólo tres. Mañana nos vemos con Ajuste de cuentas.

Mi set-list de Kamikazes enamorados (2003)

 

Kamikazes enamorados es el cuarto disco de Quique y el primero que editó en Varsovia Records, la compañía que creó después de sus malas experiencias con las discográficas en los trabajos anteriores. La primera de las cuatro canciones que elegiría es la que da nombre al disco, Kamikazes enamorados.

No me está quedando un set-list muy rockero, pero en este disco está una de mis canciones preferidas de Quique, Dos tickets. Este es el disco que tiene algunas de las canciones que más te tocan cuando estás un poco de bajón. Esta esta preciosa canción y también otras maravillosas como 7/11. Dos tickets es una de esas canciones íntimas, breves, modestas, austeras. Tan austera es que debo reconocer que no reparé realmente en ella hasta que vi el DVD de Ajuste de cuentas. Desde entonces forma parte de esa lista de canciones especiales que todos tenemos. La calidad de sonido del vídeo no es demasiado buena, pero la canción merece la pena.

La tercera canción que seleccionaría es la de Polvo en el aire.

Y la última probablemente sería Calles de Madrid. Como me haga caso eligiendo las canciones para la gira igual acabamos todos cortándonos las venas en mitad del concierto. Soy un triste, qué le vamos a hacer.

En los próximos discos ya hay alguna canción más animada, aunque donde esté una buena canción que escuchar acurrucado en el sofá en invierno que se quite lo demás. Mañana, La noche americana, el último disco que editó en Varsovia antes de volver a fichar por una discográfica. Nos vemos.